Londres, la ciudad bestial y magnífica de Inua Ellams

En una a visita Londres es posible toparse con el nombre de Inua Ellams en la National Theater, la Tate Modern o la Royal Shakespeare Company, donde se producen algunas de sus obras antes de salir de gira por Inglaterra o el exterior. Poeta y dramaturgo, coleccionista de premios, intérprete y diseñador gráfico entre cuyos clientes figuran Louis Vuitton y Coca-Cola, su trabajo refleja el semblante de una persona brillante, vulnerable y sensible que pasa la mayor parte del tiempo escribiendo en verso

“No todos los que deambulan están perdidos"; "el drama puede salvar tu vida". Estas dos citas tomadas de su página web pueden simplificar sus ideas acerca del arte y la vida. Al mudarse con sus padres de Nigeria a Londres, a los doce años, y luego a Dublín, el chico que hasta el momento había anclado su identidad en torno al terruño y a las tradiciones locales descubrió que también era 'un hombre negro'. En su escuela en Holland Park también se percató de una docena de identidades distintas: "Todo el planeta estaba en mi salón", dice Ellams, hoy de 35 años.

Inspirado por el ideal romántico de tallar la emoción en cualquier forma de arte, Ellams —quien dice estar sujeto a la oscuridad y arbitrariedad de las políticas migratorias— canaliza la rabia a la risa por medio de su trabajo. Su lenguaje es como un textil de múltiples colores que teje aspectos de la diversidad cultural londinense.

En la aclamada obra teatral Barber Shop Chronicles representa las barberías como espacios seguros donde las personas —en especial hombres negros— pueden mostrar sus emociones, encontrar intimidad y conversar sinceramente; incluso recibir consejos sobre la vida. ¿Le parece que Londres puede ser bastante opresiva para ciertos grupos sociales?

Londres es lo menos opresiva posible para muchos grupos de personas, pero esto sucede porque aquí hay gente de todas partes del mundo, con su variedad de ascendencias. Nuestras opresiones colectivas forman una marea de quejas que en últimas resulta insuperable. Es la virtud y la maldición de Londres. Es una ciudad bestial de múltiples bocas, y aun mientras disfrutamos de las muchas cosas que podemos tomar, como si estuviéramos en un banquete, nos quejamos de que no satisfaga todas nuestras papilas. Pero el intento implacable de hacerlo es lo que hace magnífica a Londres.

En 2005 usted fundó la actividad Midnight Run, que describe como "un movimiento urbano en la noche lleno de arte, juego y caminata que intenta reconectar a los habitantes de la ciudad con sus espacios". ¿De qué modo ha cambiado su percepción de la ciudad?

Londres es uno de los lugares más agitados en el mundo, una ciudad rápida y pujante. A veces es hostil para quienes buscan un ritmo de vida menos veloz, mientras que a otros se los lleva con su corriente. En ocasiones me ha ahogado, y el ritmo de tratar de trabajar con ella también ha dormido algunos aspectos de mi humanidad y mi habilidad para empatizar con extraños. Estas son algunas de las heridas que Midnight Run sana. Cuando se hace, cambia la percepción de una ciudad que está fuera de control. En su lugar, aparece un sitio al cual le podemos bajar las revoluciones por nuestra voluntad; podemos apagarlo y hacerlo más humano y empático.

Ha dicho que más que cualquier otra cosa, usted es un londinense, al tiempo que declara sentir que no encaja en esa ciudad. ¿Cómo reconciliar ambas cosas? ¿Deben reconciliarse para que usted se sienta en paz?

Londres es el hogar de quienes sienten que no pertenecen a ninguna parte, y quienes sienten que son de todas partes. Es una contradicción y estoy al tanto de ella. Y en cierta medida, prospero dentro de ella, así que no necesito reconciliar las dos cosas. El pez está en el agua tanto como el agua está en el pez.

Le preocupa la división en la ciudad entre espacios creativos e inclusivos y lugares fríos y excluyentes, resultado de los precios de propiedad. ¿Cómo está negociando la ciudad esa división?

En el momento Londres está fallando en negociar la división. Debo admitir que bajo el gobierno actual y sus políticas divisorias —de continuada creación de riqueza para los ricos, eliminación de industrias creativas y bajo presupuesto para la cultura urbana—, las cosas se pondrán peores antes de que haya esperanza alguna de que mejoren.

El autor de los celebrados panfletos de poesía Thirteen Fairy Negro Tales, Candy Coated Unicorns and Converse All-Stars y The Wire-Headed Heathen hablará en el Hay Festival Cartagena de Indias sobre su vida y su trayectoria.

Identidad, migración y convivencia. Inua Ellams en conversación con Claire Amitstead. Jueves 30 de enero, 18:00 - 19:00 h, Hotel Sofitel (salón Santa Clara)